En la Francia ocupada por los nazis de 1943, un comando de la resistencia asalta una prisión para rescatar a 12 de los suyos. Al problema de ser perseguidos por cientos de soldados alemanes se suma el hecho de que liberan a 13, lo que les hace sospechar de que un informador se ha colado, y antes de dar ningún paso tienen que encontrar quién es para que no pueda delatar todo lo que ha visto. Entre medias, se ven diversos modus operandi de la resistencia, debates internos, problemas y un poco de la vida del maquis francés. Y ha sido toda una alegría ver que en esta película se ha tenido en cuenta el importante sustrato de exiliados antifascistas de la guerra civil, evidenciado por varios de los protagonistas de la historia. Muy recomendable.
Basada muy libremente en el libro homónimo de Phillip K. Dick, la serie nos representa con bastante acierto unos EEUU derrotados en la Segunda Guerra Mundial. La mitad este pertenece al III Reich, mientras que la otra mitad esta dividida en zona neutral y en los Estados Japoneses Americanos, que son los estados de la costa oeste. Casi 20 años más tarde de la derrota ante el Eje, los movimientos de resistencia a ambos regímenes concertan la entrega de unas películas en la zona neutral. Desde Nueva York el encargado es Joe, un agente nazi infiltrado en la Resistencia a las órdenes directas del jefe de policía nazi, mientras que desde San Francisco Juliana toma el testigo de su hermana cuando es asesinada por la policía política japonesa y decide terminar su labor por ella. En su película los Aliados ganan la guerra: es una de las películas prohibidas que circulan por todos lados asociadas al hombre en el Castillo, un pintoresco y misterioso personaje asociado a la Resistencia.
Combinada con cuestiones mágicas que van más allá de la Historia Ficción, la serie da unas pautas bastante acertadas sobre cómo hubiera sido probablemente la historia de ser así: exterminio racial, asesinato masivo de disidentes, leyes raciales, estados policiales, ocupación militar, un movimiento de resistencia fuerte y rivalidades entre Japón y el III Reich que los hubieran llevado finalmente a la guerra de ganar aquel conflicto. Muy entretenida y muy recomendable, a pesar de tener algunos momentos muy extraños a nivel político probablemente asociados a cuestiones de guión.
Título original: Elisa mató a Ruth. Crónica social de una muerte anunciada Dirección:Alíshia Ninou Música: Lua Català
Productora:Plural-21, TimeForTruth.es
País: Reino de España
Año: 2018 Duración: 33 min.
Carmen, la escritora del libro homónimo que da lugar a este documental, pasó 26 años investigando las verdaderas causas que habían llevado a su hija Ruth tan prematuramente a la muerte. Aquejada de multitud de enfermedades desde muy pequeña, en 1988 una donación de sangre le costó que le hicieran sin su consentimiento el test ELISA, saliéndole positivo en VIH debido a las numerosas razones por las que podía dar positivo el test derivadas de haber pasado o sufrir ciertas dolencias. Ruth tenía todas las papeletas para dar positivo, pero los médicos que la trataron obviaron por completo sus diagnósticos anteriores o no dejaron de atiborrarla a medicamentos a discreción. Toda esto, la llamada “industria del SIDA” y la exclusión serófoba que padeció Ruth en gran parte asociada a los titulares delirantes y alarmistas que usaba la prensa al hablar del tema, vaticinando un apocalipsis que nunca tuvo lugar, fueron para Carmen las razones que le privaron de su hija.
Muy recomendable, sobre todo en estos tiempos de supuesta emergencia sanitaria.
En la Alemania del inicio de la llamada “Crisis de los refugiados”, y del incremento respectivo de la ultraderecha y del neonazismo, Hitler es absorvido por un agujero de gusano y reaparece en el lugar donde estaba su búnker en Berlín, pero setenta años después. Lo encuentra un aspirante a periodista de una cadena televisiva comercial con pocos escrúpulos, y de ahí acabará saliendo en la tele y teniendo su propio programa, ante el fenómeno fan de unas y el rechazo absoluto de gran parte de la audiencia.
La película mezcla escenas rodadas con guión y reparto con escenas de dos o tres de los actores más una cámara en diversas localidades y espacios políticos de buena parte de la República Federal, en las que las personas que se encuentran con este nuevo doble de Hitler reaccionan de diversa manera. Porque la película también explora la presencia actual del nacional-socialismo, no sólo en neonazis y grupos ultranacionalistas que salen más o menos ridiculizados en el pseudo-documental, sino en la población de a pie que tiene pocos problemas en decirle a la cara que hay que hacer algo con los inmigrantes y que algunas de las respuestas al tema racial que se dieron en el III Reich no estuvieron tan mal. Por supuesto, las reacciones de indignación tampoco se hacen esperar.
Interesante pieza complicada de definir en una palabra que es por lo menos recomendable de ver, y a poder ser en versión original, porque el actor hace de Hitler superbien. Y también para hacerse a la idea de muchas cosas que están de rabiosa actualidad.
Título original: Lesbofòbia: un documental i deu respostes Dirección:Inés Tarradellas
Música: Akelarre Fotografía:Alba Cros Pellisé
Productora: Creación Positiva
País: Reino de España
Año: 2019 Duración: 30 min.
Mediante diez entrevistas a personas atravesadas por la lesbofobia, este interesante y actual documental da diversas opiniones sobre su origen, su relación con machismo, racismo, capacitismo y otras opresiones, posibilidades para atajarlo (siempre de raíz), cómo afecta en base a la apariencia de género… Muy recomendable.
Sören ataca a un policía durante una disputa en la que él y el resto de sus camaradas skinheads nacional-socialistas atacan a un inmigrante. Es condenado a someterse a terapia psiquiátrica. Y el psicólogo que le toca resulta ser Jacob, un superviviente del Holocausto salvado gracias a que sus padres lo enviaron clandestinamente a Suecia, poco antes de perecer en las cámaras de gas de Auschwitz. La relación entre ambos protagonistas será más que tormentosa, pero lo que hace única esta película es introducir un aporte psicológico a la cuestión nazi desde la cercanía y el trato personal, sacando a relucir los traumas del joven, y las carencias emocionales que posee. Eso y un ritmo y una forma de contar la historia muy innovadores. Recomendable.
En Youtube subtitulada en portugués. Quizás nos animemos más adelanta a subtitularla en castellano, pero por ahora, y como respeto a nuestra vecindad lusoparlante, podemos hacer un esfuerzo, merece la pena.
Enmarcada dentro de la historia ficción, la película aborda cómo hubiera sido la conquista nazi de Reino Unido durante la segunda guerra mundial, de forma bastante realista: creación de un partido único, grupos partisanos acusados de comunistas, necesidad de mano de obra inglesa en Alemania, políticas raciales, prolongación de la guerra algo más… todo ello teniendo como protagonista una mujer, cosa poco habitual en este cine y menos en los años sesenta. En este caso, es una enfermera evacuada del mundo rural al Londres ocupado, que se ve obligada a entrar dentro de la maquinaria nazi para ejercer, dentro de la cual se da cuenta de las aberraciones que hicieron en otros países ocupados por el III Reich.
Título original: Screaming Queens: The Riot at Compton’s Cafeteria Dirección: Victor Silverman, Susan Stryker Guión: Victor Silverman, Susan Stryker Fotografía: Glenda Mackinson Productora: CPB, Sexuality Research Fellowship Program Science Research Council, Pomona College, Humanities, Horizonts País: Estados Unidos
Año: 2005 Duración: 57 min.
En 1966 una revuelta protagonizada por travestis y/o trabajadoras sexuales azotó el barrio del Tenderloin en San Francisco, cuando unas “travestis chillonas” rechazaron una redada de la policía en la Cafetería Copton’s, a donde solían ir durante y tras su jornada laboral. El documental, gracias a la investigación de una mujer trans, recupera el testimonio de aquellas jornadas que terminaron invisibilizadas a raíz de la respuesta más dura que tuvo lugar tres años más tarde en Nueva York, conocida como ‘La Revuelta de Stonewall’.
Título original: Madres Dirección: Josefina Cordera Guión: Eliana Piemonte, Diego Julio Ludueña, Josefina Cordera, Glenda Mackinson Fotografía: Glenda Mackinson Productora: Secretaría de Políticas Universitarias, Polo Audiovisual Córdoba, Universidad Nacional de Córdoba, Museo de Antropología (UNC) País: Argentina
Año: 2019 Duración: 62 min.
En Córdoba y otras ciudades de Argentina diversos grupos de madres se organizan para hacer frente a la violencia policial que han generado los asesinatos de sus hijos e hijas y de muchas personas más. El documental las muestra a ellas mismas, hablando de su duelo, de su manera de afrontarlo y de la situación que les empuja a llevar a cabo un activismo bastante peligroso, pues señala directamente como asesinos -o sea, los describe- a los policías y demás cuerpos represivos del país, y al resto de instituciones que los encubre, como la judicatura.
Testimonios desgarradores y empoderantes a la vez. Aunque podemos no estar de acuerdo con pedir cárcel para esta gentuza (pues no vive la misma cárcel un policía que una persona pobre de la calle, y porque la cárcel no soluciona los problemas de raíz), tienen todo nuestro apoyo y simpatía y esperamos que este archirrecomendable documental sea visionado por la mayor parte de gente posible, sobre todo en estos momentos de violencia policial y social cotidiana.
Título original: Welcome Home Dirección: Silvia Maggi Guión: Silvia Maggi, Silvia Radicioni Música: Varios Artistas País: Reino de España
Año: 2014 Duración: 29 min.
La comunidad LGTB, entre sus muchos límites y críticas, podríamos establecer como una de las principales el poco respecto generalizado que guarda hacia sus mayores, a quienes desprecia sexualmente cuando no olvida permanentemente, hablando en términos generales. Sin embargo, en 2012 se abría en Berlín Lebensort Vielfalt, una residencia gestionada por la propia comunidad para personas mayores miembros de la misma. Así pues, este documental aporta una de las primeras experiencias al respecto de la vieja Europa, por lo que es más que recomendable para activistas y para cualquier persona interesada. Muy muy recomendable.