Novica es un brillante alumno de una escuela pública serbia. Uno de sus amigos y compañero de clase es un skinhead neonazi. Los recientes conflictos en la región, un entorno familiar no muy afectivo y diversas insatisfacciones más le van a acercar a un grupo de neonazis locales, a quienes termina por unirse e implicarse notablemente.
La película no sólo explora el neonazismo como tal, sino que tiene el mérito de abarcar otros temás que tienen mucho que ver con ello, sin dar sólo un discurso individualizante hacia el fenómeno. El desmantelamiento de las estructuras autoritarias del estado socialista y la génesis de un nuevo poder con altos niveles de corrupción es un tema muy presente. El odio inoculado para y por la reciente guerra civil, en este caso especialmente contra católicos, musulmanes, croatas y bosnios, está muy frecuente, y se amplía en la película rápidamente a gitanos y homosexuales. La cuestión hooligan tiene mucho que ver, pero no sólo por el hooliganismo en sí, sino por los negocios mafiosos del mundo del fútbol y cómo se instrumentaliza a los grupos neonazis hooligans dentro de ellos. El poder policial corrupto hasta la médula influenciará los devenires del grupo neonazi hasta niveles que nos narran una clara complicidad entre el aparato policial y los neonazis a un nivel orgánico.
Y muchas más cosas que hacen de este film muy original y muy recomendable.
En agosto de 1936, un joven pastor granadino se encuentra varios cuerpos fusilados por milicianos fascistas junto a la carretera de Víznar. Uno de ellos aún vive. Se lo lleva a casa para rescatarlo, pero tiene un balazo en la cabeza que le impide hablar con coherencia y recordar quién es.
Los datos aquí incluidos harían imaginar de quién se trata a quien conozca un poco la historia de estos inicios de la guerra civil. Cuarenta y cuatro años después el pastor y el fusilado se vuelven a encontrar en la Granada posfranquista. Éste último sigue sin recordar quién es, pero su rescatador va atando cabos hasta que comienza a sospechar de quién se puede tratar.
Una película que recrea con mimo y ternura una línea paralela de la historia que más de una vez se ha sugerido, lo cual genera escenas muy emotivas y diversos discursos en torno a la memoria y a la neurodivergencia.
Un grupo de temporeros y temporeras en el Túnez actual se desplaza a faenar en un campo de higueras desde por la mañana a por la noche. Durante el trabajo florecen innúmeras conversaciones entre la plantilla que promueven diversos debates al respecto principalmente de la explotación laboral y de la feminidad: disputas a la hora de las horas y los pagos, acosos, chantajes, cuestionamientos en torno a lo que se espera de una mujer a varios niveles y diversas personas abiertamente contrarias a dichos roles…
Dos amigas bolleras están hartas de ser incapaces de ligar en el instituto y de los machirulos que las hacen bullying habitualmente. Así que deciden hacer un club de la lucha al estilo del de la obra de Palahniuk, pero feminista y no mixto, donde aprender autodefensa a base de pegarse entre ellas.
La película es una comedia con unos niveles de exageración gigantes dentro de todos los retratos de la vida de instituto. La autodefensa feminista es el tema protagonista, aunque hay muchos otros igual de interesantes, como el machismo, las gestiones emocionales, el consentimiento informado, el acoso escolar, etc.
Como bien aputna en su inicio el documental, los 7 meses en los que Málaga protagonizó un proceso revolucionario desde el inicio de la guerra civil hasta su caída en manos fascistas en febrero de 1937 están bastante olvidades en general, incluso en la propia urbe. Este documental parece intentar rescatarlos, usando los testimonios y mediant las dramatizaciones de diversos personajes que fueron testigos de aquello, de diverso calado ideológico.
Estamos ante un buen documental bastante fidedigno, pero los enfoques nunca son neutrales, y menos en un tema como éste, y hemos echado muy en falta que se hablara de otras cosas más que tuvieron lugar durante el Comité de Salud Pública, el órgano revolucionario dirigente de la ciudad durante ese tiempo, en especial al principio.Se centra principalmente en la represión que llevó a cabo contra fascistas y sospechosos de fascistas, lo cual sin duda fue cierto, pero pasaron bastantes cosas más, como que se colectivizaran industrias, comercios, las tierras alrededor de la ciudad, se expropiaran edificios de fascistas huidos o fusilados para albergados la cada vez mayor afluencia de personas refugiadas que huían de Franco, o cómo se repartñian equitativabent los alimentos por los barrios. Ni siquiera nos hablan de la composición política de dicho comité, ni de por qué se llamaba así, que era una referencia al gobierno jacobino durante la Revolución Francesa. Por ende, se pasa muy por encima de los tiras y aflojas entre el gobierno republicano central y el malagueño, donde el primero intentaba pisarle competencia al segundo todo el tiempo, y sólo se aprecia entre líneas que la resistencia del segundo fue un motivo destacado para que el gobierno republicano abandonara Málaga a merced de Franco cuando cayó. Omitir todo esto proviene de un sesgo ideológico que nos da bastante pena que siga permaneciendo en trabajos como éste que cierto rigor histórico muestran sin duda.
La toma de Málaga como tal está bastante bien contada, eso sin duda, si ncentrarse mucho en la Desbandá, de la que hay bastantes trabajos. Y muchos otros aspectos más, como la vida cotidiana, los bombardeos, el día del golpe de estado, etc. Aunque podía haberse entrado en más detalles en cada aspecto, en cualquier caso.
Título original: Ácratas
Dirección: Virginia Martínez
Guion: Virginia Martínez Música: Hugo Jasa, Carlos Cotelo
Fotografía: Daniel Cheico País: Uruguay
Año: 2000 Duración: 73min.
Este documental uruguayo repasa las migraciones y acciones de anarquistas en el Río de la Plata durante los años 20 y 30 del siglo XX, con especial énfasis en la figura del anarquista italiano Miguel Arcángel Roscigno. En especial repas la historia del anarquismo insurreccional en Montevideo: sus expropiaciones, sus atentados, la represión y encarcelamiento que sufrieron, sus vidas previas a tener que emigrar, la relación con Argentina… Realizando un cuadro bastante fidedigno que cuenta además con testimonios de familiares de sus protagonistas, e incluso con personas que lo vivieron.
En agosto de 2005 los diques de Nueva Orleans cedieron ante el huracán Katrina, inundando la mayor parte de la ciudad y provocando cientos de muertos y la destrucción de un porcentaje elevado de sus casas y bienes. Con una población muy mayoritariamente negra y poco amiga del Partido Republicano, el gobierno de George Bush ni aportó dinero para mejorar los diques años antes cuando se avisaba de su vulnerabilidad, ni tuvo intención real alguna en salvar y ayudar a sus habitantes y en reconstruir la ciudad. Las muertes bajo custodia policial y los asesinatos policiales en plena calle fueron la tónica habitual en los siguientes días, tratando la tragedia como una de las tantas aventuras coloniales estadounidenses: envío del ejército y la guardia nacional, hacinamiento de sus habitantes en un estadio, detención de las personas rescatadas bajo perfiles raciales…
La serie arranca unas pocas semanas después de huracán, cuando comienza la reconstrucción de la ciudad y la gente está intentando volver a la ciudad y retomar su vida cultural y laboral. Mediante un largo elenco de personajes de todo tipo, veremos con detalle la rica cultura musical de la ciudad y su archifamoso jazz local. Por ello varios personajes son músicos, lo que nos presenta la noche local, pero también la precariedad del oficio, la explotación de cazatalentos y discográficas, los conflictos con el vecindario y en especial con la policía, la adicción a drogas legales e ilegales, la vulnerabilidad ante el auge de los atracos y asesinatos posteriores al huracán… con especial hincapié en cada temporada al Mardi Gras, la fiesta local que coincide con nuestros carnavales, y que aparece detalladamente descrita. En el plano inmobiliario y laboral, veremos las estafas de los seguros que nunca pagaron nada a mucha de la población residente, veremos especulación astronómica, gente que pierde sus negocios y gente que se desplaza a la ciudad buscando sacar tajada de la situación, corruptelas gigantes con el ayuntamiento y con los fondos federales, derribos para expulsar población pobre y negra de ciertas zonas y gentrificarlas, okupaciones de casas vacías para reivindicar que se abran a la población local que quiere volver, estafas con contratistas y conflictos intrafamiliarias por mantenerse o volver a la ciudad…
El racismo es un tema que atraviesa cada capítulo de comienzo a fin. Va desde el gigantesco racismo policial hasta los toques de atención a blancos por querer tomar un espacio cultural y musical que no es el suyo. Las personas racializadas tienen un papel muy destacado en la serie, y para nada es un grupo homogéneo: hay dos personas de origen asiático, pero una es neoyorquina desde varias generaciones y la otra es vietnamita, manteniendo gran parte de las tradiciones de esta nutrida comunidad compuesta en general por personas que huyeron de su país tras la victoria comunista. Y la comunidad afro, la más numerosa de la serie, es muy variada en cuestión de clase, de género, de origen y de racialización. La comunidad afroindia está muy presente, con énfasis en su cultura y en sus impactantes desfiles, y es fácil deducir por los apellidos si provienen de esclavos con antiguos propietarios franceses o ingleses, ya que hasta 1810 aquello pertenecía al Virreinato de Nueva Francia, tras un pequeño lapso en la segunda mitad del siglo XVIII que fue del Virreinato de Nueva España. Una interesantísima mezcla cultural que hace del lugar un punto tan singular dentro del Caribe y de los EEUU.
Y un punto que nos ha parecido espectacular en la historia es haberse puesto a abordar la corrupción local, la dejadez política y en especial la violencia y el maltrato policial. Para ello han usado los personajes de un profesor youtuber, una abogada de derechos civiles, la hija que tienen en común, un policía que desprecia la corrupción de su cuerpo y un periodista foráneo. Mediante estos personajes se nos presentará la gestión policial mortífera que se dio durante el Katrina y los días posteriores, pues la abogada acompaña a diversas personas que buscan familiares perdidos o muertos en extrañas circunstancias. De manera realista, libre de maniqueísmos, lenta y cruda iremos viendo la omertà que reina dentro de la policía, donde los abusos, crímenes y asesinatos a sangre fría cometidos por el departamento de policía son tapados por compañeros y oficiales, incluso por aquellos agentes que no son corruptos ni están de acuerdo con tales prácticas.
Título original: Dulcinea
Dirección: Paloma Polo Música: Adrián De Alfonso
Fotografía: David Ferrando Giraut
Reparto: Itziar Ituño, Nerea Lorón País: Reino de España
Año: 2023 Duración: 90 min.
Dulcinea Bellido fue una pionera feminista y comunista de la historia reciente del estado español. Nacida en la provincia de Badajoz en 1936, en 1953 entró en el Partido Comunista de España, participando en diversas movilizaciones contra el aparato franquista. Ello le acarrearía prisión y también nuevas amistades, como su futuro marido y varias de las que serían junto a ella punteras en la organización de las mujeres en los barrios y en las asociaciones vecinales.
Esta película es además una tremenda apuesta cinematográfica: en un contexto donde el cine es cada vez más rápido, el sonido más desarrollado y se impone el color para llegar a la gran mayor parte del público, estamos ante una película que en su gran mayor parte es muda, en blanco y negro y ha sido realizada mediante fotografía. Y el resultado es indudablemente magnífico, con un trabajo impresionante del reparto y del personal de fotografía que consigue que entendamos las situaciones que se están dando, los complicados debates políticos e incluso nos compunjamos ante situaciones de tensión y abuso policial.
El surgimiento del feminismo posterior a la Guerra Civil, la represión policial, las reuniones en las iglesias, las movilizaciones de las mujeres y el desarrollo de las primeras décadas de vida de este interesante personaje histórico los veremos muy bien contados y desarrollados. Si crees que el cine de este tipo no te llama demasiado, te recomendamos intentar verla igualmente, ya que es una pieza cinematográfica altamente recomendable, y de gran valor historiográfico al traer al presente figuras históricas que necesitamos conocer como guía en el presente y jamás dejar que se pierdan en el olvido.
En 1971 se fundó en París uno de los colectivos que más relevancia tendría en la liberación gay en la Europa del momento: en Front Homossexuel d’Action Révolutionaire, o FHAR. Hijo del contexto revolucionario post-mayo de 1968 y de los desencuentros en torno a la divergencia sexual dentro del movimiento feminista francés, el FHAR se atrevió en sus actos y en sus escritos a cuestionar pilares mundamentales de la sociedad occidental del momento: la sexualidad no reproductiva, el sexo anal y en concreto el recibirlo, las relaciones intergeneracionales, la cuestión de la opresión clase en relación al heteropatriarcado, las identidades travestis… Todo ello publicado en revistas y libros que fueron prohibidos, exhibido en manifestaciones como las del 1.º de mayo, en boicots a congresos médicos homófobos. También fue hijo de su tiempo, y el documental tiene el buen hacer de describir el proceso de debate al respecto abierto ya por el feminismo desde finales de los 60′ oganizado en el Movimento de Liberación de las Mujeres (MLV), en su lucha por despenalizar el aborto y por emancipar a la mujer del matrimonio y la iglesia. Para ello recuerdan la figura de Françoise d’Eaubonne, veterana feminista más tarde integrante del FHAR. Y le otorga la misma relevancia a Guy Hocquenghem, destacado teórico marica de la época con un discurso muy anarquizante sobre la base del marxismo, que fue sobradamente usado por estos años para darle coherencia a la liberación sexual y para buscar alianzas con otros grupos con el fin de despenalizar la homosexualidad.
Muy entretenido y dinámico, repleno de testimonios y de material de archivo. Tiene el mérito también de haber contado con un colectivo de maricas y bolleras radicales que existía en el momento, Pantehères Roses, que aportan su opinión sobre el FHAR en base a su activismo desarrollado por entonces.
Título original: The Corporation
Dirección: Mark Achbar, Jennifer Abbott, Joel Bakan
Guion: Joel Bakan Música: Leonard J. Paul
Fotografía: Mark Achbar, Jennifer Abbott
Productora: Big Picture Media Corporation País: Canadá
Año: 2003 Duración: 129 min.
A través de su historia y su presente, este documental compara diversas corporaciones empresariales con un cuadro clínico de psicopatía en su funcionamiento. La despersonalización, la ausencia de responsabilidad, la incapacidad de ver a otras personas ajenas a la corporación como seres sintientes e iguales, la puesta como valor fundamental el beneficio económico por encima del resto y varias cosas más son razones a las que alude el documental, ejemplificando todo sobradamente, para explicar que las corporaciones hayan sido capaces en el último siglo de devastar ecosistemas envenenándolos y dañando también la salud de los seres humanos locales, de haber sido cómplices directas con el genocidio nazi, de arrancar recursos naturales y condenar a amplias comunidades humanas a la pobreza, a la deshidratación y/o a la inanición, de instar a gobiernos locales a encarcelar y asesinar a quienes critican sus procederes…
El documental cuenta con testimonios directos de éstas últimas personas, así como de especialistas en salud mental y de activistas que desde los países de origen de estas corporaciones denuncian sus prácticas.