Título original: La révolution française
Dirección: Robert Enrico, Richard T. Heffron
Guión: David Ambrose, Daniel Boulanger, Robert Enrico, Richard T. Heffron, Fred A. Wyler
Música: Georges Delerue
Fotografía: François Catonné, Bernard Zitzermann
Reparto: Klaus Maria Brandauer, Jane Seymour, François Cluzet, Jean-François Balmer, Andrzej Seweryn, Marianne Basler, Peter Ustinov, Claudia Cardinale, Christopher Lee, Sam Neill, Michel Galabru, Michel Duchaussoy, Philippine Leroy-Beaulieu
Productora: Coproducción Francia-Italia-Alemania del Oeste (RFA)-Canadá-Reino Unido; Les Films Ariane, Films A2, Laura Film, Antea Cinematografica, Alcor Films, Alliance Communications Corporation, Ministère de la Culture, Eurimages
País: Francia
Año: 1989
Duración: 360 min.
Pese a ser una superproducción mainstream, esta película larga o miniserie de dos capítulos, según queramos llamarla, ofrece una descripción minuciosa y muy acertada de la Revolución Francesa. De hecho, teniendo en cuenta el límite que ofrece el cine la hora de contar relatos históricos, es una pieza muy completa. Deduzco que si la profesora de historia del instituto de la persona que escribe estas líneas no recomendó a sus alumnos ver esta película, probablemente sería porque consideró demasiado para unos estudiantes de la ESO ver cinco horas de subtítulos, pero lo cierto es que es muy instructiva explica bien todo y como película está bastante bien hecha en cuanto a guión, decorados, ambientación, personajes, hilo argumentativo…
Sólo le vemo tres problemas: el primero, que la pelicula está centrada casi completamente en la ciudad de París, epicentro sin duda de la revolución, pero que invisibiliza la importancia de otras regiones en estos años y recae en el centralismo político francés y en el de la propia historiografía. El segundo, que algunos conceptos políticos están explicados muy de pasada, por lo que es recomendable tener este tema algo trilladillo para poder entender bien todos los matices de lo que está pasando, puesto que en ocasiones un concepto político esencial te lo explican en una conversación de treinta segundos. Y el tercero y último, problema que comparte con buena parte de la producción literaria y cinematográfica de la Revolución Francesa, es que parece como si la revolución acabara en 1795 con la caída del gobierno jacobino. Sin duda, acabó con ello la época más convulsa de la revolución, pero el régimen político continuó, con un giro claramente hacia el conservadurismo que sería la antesala de la dictadura y posterior Imperio del General Bonaparte (que, a pesar de todo, sigue siendo la Revolución Francesa también, aunque ya en un estadio completamente irreconocible). Pero entre 1795 y 1799 siguió habiendo Constitución, elecciones, Asamblea Nacional, guerra europea y eventos importantes, como la Conjura de los Iguales de François Babeuf, considerado como el primero intento de toma de poder por fuerzas socialistas de la historia -lo cual no es del todo cierto si somos flexibles con los adjetivos-.
En cualquier caso, es una pieza recomendable.
Completa en episodios 01 y 02, subtitulados en catellano, y en nuestro archivo.